
Preguntas frecuentes
Artritis
La artritis se caracteriza por dolor, calor, rubor y tumefacción articular. Se origina por afectación de una membrana que recubre las articulaciones, denominada membrana sinovial. En la artritis, el dolor es permanente, no desaparece con el reposo y suele despertar al paciente en la noche.
Esta patología, puede ser aguda o crónica según la causa que la determine. Puede provocarse por diversas razones: enfermedades autoinmunes, infecciones, depósito de cristales, un traumatismo entre otras, pudiendo afectar una o más articulaciones según la causa.
El sistema inmune defiende nuestro organismo fundamentalmente de agentes infecciosos. El sistema inmune reconoce el virus o bacteria y genera “anticuerpos” que van a permitir destruir ese virus o bacteria. En ocasiones, el sistema inmune se equivoca y genera anticuerpos contra estructuras propias, atacando diferentes órganos, entre ellos a las articulaciones. Cuando esto ocurre, estos anticuerpos producen inflamación y se segregan sustancias nocivas, que pueden dañar mucho al órgano afectado.
El tener una o más articulaciones inflamadas ya es una alerta y corresponde consulta al Reumatólogo. Si ya tiene diagnostico de una enfermedad reumatológica y cambian los síntomas o aumenta la limitación para las actividades diarias también son una alerta.
Si tiene diagnóstico de artritis reumatoidea y tiene varias articulaciones inflamadas o aumenta la rigidez matinal o nota dolor cervical intenso, molestias en la articulación de la mandíbula o dolor en la articulación de la cadera (con dolor en la ingle y dificultad para mover la pierna), o cualquier síntoma nuevo, debe consultar a su Reumatólogo de cabecera. Si no tiene Reumatólogo de cabecera, deberá propiciarse uno.
El ruido se debe a la rotura de burbujas de aire del líquido sinovial que lubrica las articulaciones, con el movimiento estas burbujas se rompen dentro de la articulación y hacen ruido. Si no se asocia con dolor u otra afectación articular, no tiene mayor importancia, no obstante, puede consultar con su médico.
No. Si bien no es un signo relevante, aconsejamos no hacer tronar los dedos o la columna. Lejos de “destrabarse”, pueden ocasionar un microtraumatismo, que repetido en el tiempo, puede ser perjudicial.
Los ruidos articulares, cuando se asocian a dolor en entumecimiento después de estar un tiempo en reposo, generalmente se deben a artrosis u osteoartritis. En este caso, deberá consultar un Reumatólogo.
Sí. Las causas por las que se pueden inflamar las articulaciones pueden ser diversas. Existen causas autoinmunes, por anticuerpos que el propio cuerpo produce (artritis reumatoidea, colagenopatías, espondiloartritis), por microcristales (de ácido úrico, de pirofosfato de calcio, etc.), infecciosas o incluso traumáticas.
Es una enfermedad inflamatoria de las articulaciones, crónica, que de no tratarse puede ser invalidante. Afecta al 1% a la población mundial, principalmente a mujeres y suele aparecer entre los 40-50 años, aunque también afecta a niños y ancianos.
La causa es desconocida, aunque existe una predisposición genética sobre la que actúan factores hormonales y ambientales (infecciones, tabaquismo, etc., aunque la mayoría son desconocidos), generándose una respuesta inmunológica principalmente contra las articulaciones.
Los síntomas son hinchazón, dolor, enrojecimiento y deformidad de las articulaciones, dificultad para el movimiento y rigidez matutina prolongada. Preferentemente se manifiesta en manos y pies, aunque puede afectar órganos como el pulmón, corazón, ojos y otros.
Ante la aparición de alguno de los síntomas, debe consultar al médico que lo derivará al reumatólogo para hacer el diagnóstico y comenzar el tratamiento.
El diagnostico se realiza en base a los síntomas y exploración minuciosa de las articulaciones. Los exámenes de laboratorio y radiologías son importantes para el seguimiento de la enfermedad, pero no hay ningún examen que por sí mismo haga el diagnóstico o lo excluya.
Es fundamental que el tratamiento sea lo antes posible para evitar deformidades de las articulaciones, el mismo deber ser individualizado y dirigido por el reumatólogo.
La artritis reumatoidea es una enfermedad autoinmune, caracterizada por la inflamación de pequeñas, medianas y grandes articulaciones, generalmente bilateral y simétrica, en ocasiones acompañado de rigidez matinal. Si bien lo característico es la afectación articular, puede afectar otras partes del cuerpo. Requiere consulta precoz con el Reumatólogo para hacer diagnóstico y tratamiento oportuno para intentar la remisión de la enfermedad y evitar deformaciones y pérdida de la capacidad funcional.
La
osteoartritis u artrosis
, es la enfermedad articular más frecuente y se caracteriza por producir dolor con el uso de la o las articulaciones afectadas, puede o no acompañarse de inflamación, es de inicio insidioso, está asociado al desgaste articular. Puede asociarse a antecedentes familiares de artrosis.
La artritis psoriásica es una enfermedad de las articulaciones que se puede presentar en pacientes con psoriasis. Se caracteriza por dolor e hinchazón y limitaciones en la movilidad de las articulaciones y puede evolucionar si no hay tratamiento, puede llegar a desarrollar deformidades articulares.También puede afectar la columna y haber episodios de tumefacción de todo un dedo, dolor en los talones o a la presión de ciertas regiones. Esta enfermedad puede preceder a la aparición de las lesiones en la piel.
Dependerá la causa de la artritis, pero lo fundamental será consultar un Reumatólogo y que se establezca el diagnostico exacto. El Reumatólogo establecerá el tratamiento más adecuado. Mientras no se produce la consulta puede usar hielo y no exigir demasiado la o las articulaciones inflamadas. Su médico general podrá ayudarlo con medicación antiinflamatoria hasta que el Reumatólogo pueda estudiar las causas de la inflamación.